Hoy en día podemos encontrar notas donde grandes empresas como Apple, Google, IBM y Netflix han dejado de darle tanta relevancia al número de diplomas con los que cuenta un candidato, para poner foco en las competencias blandas, también conocidas como soft skills. Esto no quiere decir que las hard skills no sean importantes, sino que ambas son complementarias.
Los estudios realizados por la Universidad de Harvard, la fundación Carnegie y el Stanford Research Center determinaron que el 85 % del éxito laboral depende de las soft skills. Podríamos decir que las herramientas duras te dan la oportunidad de conseguir entrevistas laborales, pero contar con herramientas blandas hará que te quedes con el puesto de trabajo.
¿Pero, qué son las soft skills?
Las soft skills están relacionadas con la inteligencia emocional, que nos da la posibilidad de apreciar y expresar nuestras emociones y entender las de los demás. Es la aptitud social cuya habilidad nos permite la interacción con otras personas.
El diccionario inglés Collins las define como “las cualidades, deseables para ciertos trabajos e independientes del conocimiento adquirido, como el sentido común, el manejo de personas y una flexible actitud positiva”.
Una habilidad blanda distingue a dos personas con igual formación académica en el momento de emprender un proyecto, solucionar un conflicto o relacionarse con los demás.
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Hay personas que poseen estas habilidades naturalmente, pero lo más importante es que aquellos que no cuenten con ellas pueden desarrollarlas, ¡siempre y cuando se lo propongan!
Estas son solo algunas de las tantas que existen:
- Habilidades de comunicación
- Elocuencia
- Persuasión
- Adaptabilidad
- Autoestima
- Creatividad
- Trabajo en equipo
- Liderazgo
- Gestión del tiempo
- Escucha activa
- Empatía
- Resolución de conflictos
- Negociación
Aquí os dejamos algunos consejos sobre cómo mejorar algunas herramientas blandas.
Comunicar con eficacia: es la capacidad de expresarse con claridad, hablando (por ejemplo en presentaciones en público) y escribiendo (un libro, un manual, etcétera). La comunicación es clave para entendernos, hoy, en un mundo con excesiva carga de información y aún más en los entornos laborales, donde muchas veces la comunicación está mediada por la tecnología. Aconsejamos usar estas herramientas (chat, email, teléfono, videoconferencia) solo en aquellas ocasiones en las que realmente es imposible el diálogo cara a cara, ya que los intercambios se deben realizar de forma fluida, concisa y clara.
En caso de presenciar diferencias en una conversación, es necesario primero escuchar de forma activa y con empatía para entender el punto de vista que difiere del nuestro, tal vez así podamos ver algo que no teníamos en cuenta respecto al tema; solo después de eso se puede plantear una opinión distinta, pero siempre respetando la mirada ajena.
Tolerancia a los errores: es importante ser más benevolentes con los otros y con nosotros mismos, aceptar y aprender de las críticas. Cuando se produce un error es importante no frustrarse, sino ir más allá y buscar formas originales de encontrar soluciones. De esta manera podremos contribuir y entrenar las capacidades de crear e innovar.
Trabajo en equipo: el trabajo en equipo suele ser productivo porque permite capitalizar la diversidad al tener múltiples visiones e ideas frente a una meta determinada, pero requiere dejar de lado el individualismo y generar relaciones de confianza entre sus integrantes. Cooperación, llevarse bien con los demás, ser agradable, animado y ayudar a quienes lo necesitan..
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